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Puntos de conversación:
- Todos los creyentes estaban juntos para el Pentecostés y el sonido de un viento fuerte llenó la casa, lo que para la mente judía era un símbolo del Espíritu Santo. Hechos 2:1-2, Ezequiel 37:9-14
- Algo parecido a llamas apareció sobre cada creyente, otro símbolo más de la presencia de Dios. Anteriormente los discípulos habían sido influenciados por el Espíritu Santo, pero ahora el Espíritu vivirá en ellos – algo que Jesús prometió que sucedería. Hechos 2:3-4, Juan 14:16-17
- Muchos judíos devotos se sintieron atraídos por la escena y escucharon a los creyentes hablar milagrosamente en sus diversos idiomas. Este fue el propósito de Dios desde el principio: compartir el mensaje de Jesús con cada nación. Hechos 2:5-13
Hoy estamos estudiando Hechos 2:1-13, el pasaje que esencialmente describe el nacimiento de la iglesia cristiana. Comienza a responder una pregunta importante: ¿Cuál es el propósito del bautismo con el Espíritu Santo?
La lección de hoy tiene algo para todos; a los que les gusta este tema como a los pentecostales y carismáticos. A los que les desconcierta este tema como los cristianos de orígenes religiosos más tranquilos y a los no denominaciones, etc. Los que son nuevos en el cristianismo y piensan: “no estoy seguro de qué estamos hablando”.
El concepto pentecostés o pentescostal ganó especial prominencia durante el avivamiento pentecostal de principios del siglo XX, comenzando con el avivamiento de la calle Azusa en 1906. Enfatizó una experiencia poderosa y personal de la presencia de Dios y la manifestación de los dones espirituales.
Las Asambleas de Dios son una de las denominaciones pentecostales más grandes del mundo, fundada en 1914 en Hot Springs, Arkansas. Otra iglesia de esta denominación es La Iglesia Cuadrangular fundada en 1923 por la evangelista Aimee Semple McPherson en Los Ángeles, California.
A mediados del siglo XX, este énfasis se extendió más allá de las denominaciones pentecostales al movimiento carismático más amplio que abrazó experiencias similares del Espíritu Santo. El Movimiento Jesús en los años 60 y 70, junto con Calvary Chapel es un ejemplo de este movimiento. Otro ejemplo es el Movimiento Vineyard que comenzó a finales de la década de 1970 y fue fundado por John Wimber. La primera iglesia de Vineyard se estableció oficialmente en 1982 en Anaheim, California. Otros ejemplos son Hillsong, Iglesia Betel, etc. También han habido movimientos carismáticos católicos.
En estos ambientes oirás hablar del “bautismo con el Espíritu Santo”. Y la evidencia principal que existe para este bautismo, según ellos, es el hablar en lenguas. Si no has crecido en una iglesia así, o si nunca lo has visto, puede que te asustes. Pero ¿qué dice la Biblia al respecto? Eso es lo que responderemos hoy: ¿Cuál es el propósito del bautismo con el Espíritu Santo? No creemos en las cosas por lo raras o normales que parecen. Miramos a Dios y su Palabra en todo lo que hacemos (y creemos).
En primer lugar, el “bautismo con el Espíritu Santo” está en la Biblia y no fue inventado por los pentecostales ni los carismáticos. ¡El término fue creado por Jesús!
Hechos 1:5 (NTV) Juan bautizaba con agua, pero en unos cuantos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo».
Por eso los discípulos regresaron a Jerusalén donde practicaron ciertas disciplinas espirituales como la conexión, la oración y el estudio bíblico. Allí, esperaron en Dios con gran expectativa.
El bautismo con el Espíritu Santo era un concepto bíblico mucho antes de que fuera algo pentecostal. La verdadera pregunta es ¿cuál es el objetivo? Eso es lo que nuestro texto responderá hoy. El movimiento pentecostal o pentecostés tiene sus raíces en Hechos capítulo 2, mas creo que se equivocan en cómo lo aplican.
Todos los creyentes estaban juntos para el Pentecostés y el sonido de un viento fuerte llenó la casa, lo que para la mente judía era un símbolo del Espíritu Santo.
Hechos 2:1-2 (NTV) El día de Pentecostés, todos los creyentes estaban reunidos en un mismo lugar. De repente, se oyó un ruido desde el cielo parecido al estruendo de un viento fuerte e impetuoso que llenó la casa donde estaban sentados.
Analicemos las palabras o frases subrayadas.
Pentecostés
El Pentecostés es una de las tres grandes fiestas de peregrinación del judaísmo, junto con la Pascua y los Tabernáculos. Es celebrado el quincuagésimo día (50 días) después de la Pascua como lo relata Levítico 23:15-16. El Comentario Bíblico del Expositor comenta que “Originalmente era la Fiesta de las Primicias de la cosecha del grano (Éx 23:16; Lev 23:17-22; Núm 28:26-31); se la llamaba Fiesta de las Semanas porque se producía después de un período de siete semanas de cosecha que comenzaba con la ofrenda de la primera gavilla de cebada durante la celebración de la Pascua…. Sin embargo, en la época del primer siglo d.C., se consideraba el aniversario de la entrega de la ley en el Monte Sinaí y era un momento para la renovación anual del pacto mosaico… “ En otras palabras, el Pentecostés vino a ser un día festivo para conmemorar el haber recibido la ley. Mejor dicho, la entrega de la Ley a Moises. ¡Esto es importante! Volveremos a esto en un momento.
un ruido
Quiere decir que ¡esto fue algo público, no privado! Todos los presentes escucharon este ruido.
estruendo de un viento
Sonaba como un viento; pero ¿era realmente viento? La palabra viento en hebreo es ruah que en griego viene a ser pneuma que significa espíritu. Si vamos a las Escrituras veremos varios ejemplos de la palabra viento teniendo este significado de espíritu. Veamos dos de estos ejemplos:
Ezequiel 37:9 (NTV) Luego me dijo: «Hijo de hombre, anuncia un mensaje profético a los vientos. Anuncia un mensaje profético y di: “Esto dice el Señor Soberano: ‘¡Ven, oh aliento, ven de los cuatro vientos y sopla en estos cuerpos muertos para que vuelvan a vivir!’”».
Ezequiel 37:10-14 (NTV) Así que yo anuncié el mensaje como él me ordenó y entró aliento en los cuerpos. Todos volvieron a la vida y se pusieron de pie; era un gran ejército. Luego me dijo: «Hijo de hombre, estos huesos representan al pueblo de Israel. Ellos dicen: “Nos hemos vuelto huesos viejos y secos; hemos perdido toda esperanza. Nuestra nación está acabada”. Por lo tanto, profetiza y diles: “Esto dice el Señor Soberano: ‘Oh pueblo mío, abriré las tumbas del destierro y haré que te levantes. Luego te regresaré a la tierra de Israel. Cuando eso suceda, pueblo mío, sabrás que yo soy el Señor. Pondré mi Espíritu en ti, volverás a vivir y regresarás a tu propia tierra. Entonces sabrás que yo, el Señor, he hablado y que he cumplido mi palabra. ¡Sí, el Señor ha hablado!’”».
Aparte del estruendo de un viento fuerte e impetuoso, sucedió algo aún más sobrenatural.
Algo parecido a llamas apareció sobre cada creyente, otro símbolo más de la presencia de Dios. Anteriormente los discípulos habían sido influenciados por el Espíritu Santo, pero ahora el Espíritu vivirá en ellos – algo que Jesús prometió que sucedería.
Hechos 2:3-4 (NTV) Luego, algo parecido a unas llamas o lenguas de fuego aparecieron y se posaron sobre cada uno de ellos. Y todos los presentes fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otros idiomas, conforme el Espíritu Santo les daba esa capacidad.
Una vez más, analicemos el pasaje.
fuego
Para un lector como tú y como yo, esto parece extraordinario y sobrenatural. Esto no era nada nuevo para el pueblo judio. Recordemos que la presencia de Dios se hizo ver:
- En la zarza ardiente cuando Dios llamó a Moisés (Éxodo 3:2-5).
- La columna de fuego de noche que guiaba al pueblo de Israel de noche (Éxodo 13:21)
- El fuego consumidor en el Monte Sinaí (Éxodo 24:17)
- El fuego que resplandece durante la noche dentro de la nube que estaba sobre el tabernáculo (Éxodo 40:38).
- Ya en el NT, Juan el Bautista aludió al Espíritu Santo con el fuego diciendo que Jesús los bautizaría con el Espíritu Santo y con fuego (Mateo 3:11; Lucas 3:16)
cada uno de ellos
Esto representó un cambio en la forma en que Dios se relacionaría con su pueblo: ahora sería personal, no sólo corporativo. Ya no sería para un grupo sino seria un trato con cada individuo; más personal.
Bajo el antiguo pacto, la presencia de Dios reposaba sobre el pueblo de Israel como entidad corporativa y colectiva o sobre los líderes del pueblo para un propósito específico. Sin embargo, “…bajo el nuevo pacto, establecido por Jesús e inaugurado en Pentecostés, el Espíritu ahora reposa sobre cada creyente individualmente. En otras palabras, aunque los aspectos corporativos e individuales de la redención en realidad no pueden separarse, El énfasis en la proclamación de la redención desde Pentecostés en adelante está en la relación personal de Dios con el creyente a través del Espíritu, con todas las relaciones corporativas resultantes de esto” (Comentario bíblico del Expositor). Para clarificar, el Espíritu Santo ya no desciende de vez en cuando sobre un pueblo por un propósito especial, sino que ahora vive dentro de nosotros de una manera personal. Es un trato entre Dios y tú. Bajo el nuevo pacto establecido por Jesús, el Espíritu Santo vino para acercarte a ti a Dios con las ventajas de ser parte de un grupo mayor de cristianos; hombres y mujeres que como tu, vienen a ser parte de la familia de Dios.
llenos del Espíritu Santo
Nota que los discípulos ya era influenciados por el Espíritu Santo. Empero, estar “lleno” es algo diferente a ser influenciado por a ser movido a hacer algo.
Juan 14:16-17 (NTV) Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Abogado Defensor, quien estará con ustedes para siempre. Me refiero al Espíritu Santo, quien guía a toda la verdad. El mundo no puede recibirlo porque no lo busca ni lo reconoce; pero ustedes sí lo conocen, porque ahora él vive con ustedes y después estará en ustedes.
Veamos la diferencia entre “morada” versus influencia. Antes del Pentecostés, el Espíritu Santo los movía a que hicieran algo. Después del Pentecostés, el Espíritu vino a morir dentro de cada uno de los creyentes. Vale la pena señalar este pasaje:
Juan 20:21-22 (NTV) Una vez más les dijo: «La paz sea con ustedes. Como el Padre me envió a mí, así yo los envío a ustedes». Entonces sopló sobre ellos y les dijo: «Reciban al Espíritu Santo.
Esto es mucho antes de Pentecostés. Entonces ¿les dio el Espíritu Santo dos veces? ¡No! Jesús les dio el Espíritu Santo aquí, para prepararlos para el ministerio que les había encomendado. Este hecho de soplar sobre ellos fue el anuncio inicial del regalo prometido que vendría después de que Jesús subiera al cielo. El Pentecostés, como se le ha llegado a conocer a este suceso grandioso, fue el cumplimiento histórico.
El Pentecostés fue para el judaísmo el día de la entrega de la ley, pero desde ese día, para los crisitianos ha venido a hacer el día de la venida del Espíritu Santo (Comentario bíblico del expositor). La ley para el AT era como la constitución, una guía para el pueblo. El Espíritu Santo para el NT desempeña este papel, ¡pero de una manera mejor! El Comentario bíblico del expositor nota que “la venida del Espíritu señala la diferencia esencial entre la fe judía y el compromiso con Jesús, porque mientras la primera está centrada y dirigida en la Torá, la segunda está centrada en Cristo y dirigida por el Espíritu.” Esto es prácticamente lo que dice en Jeremias.
Jeremías 31:33-34 (NTV) «Pero este es el nuevo pacto que haré con el pueblo de Israel después de esos días—dice el Señor—. Pondré mis instrucciones en lo más profundo de ellos y las escribiré en su corazón. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no habrá necesidad de enseñar a sus vecinos ni habrá necesidad de enseñar a sus parientes diciendo: “Deberías conocer al Señor”. Pues todos ya me conocerán, desde el más pequeño hasta el más grande—dice el Señor—. Perdonaré sus maldades y nunca más me acordaré de sus pecados».
Ahora sus mandamientos y leyes están escritos en nuestros corazones porque Su Espíritu Santo vive dentro de nosotros. Es Su Espíritu que ahora nos guía a hacer lo correcto y nos ayuda a entender lo que Dios dice en Su Palabra, la Biblia, para que lo hagamos.
Muchos judíos devotos se sintieron atraídos por la escena y escucharon a los creyentes hablar milagrosamente en sus diversos idiomas. Este fue el propósito de Dios desde el principio: compartir el mensaje de Jesús con cada nación.
Hechos 2:5-13 (NTV) En esa ocasión, había judíos devotos de todas las naciones, que vivían en Jerusalén. Cuando oyeron el fuerte ruido, todos llegaron corriendo y quedaron desconcertados al escuchar sus propios idiomas hablados por los creyentes. Estaban totalmente asombrados. «¿Cómo puede ser?—exclamaban—. Todas estas personas son de Galilea, ¡y aun así las oímos hablar en nuestra lengua materna! Aquí estamos nosotros: partos, medos, elamitas, gente de Mesopotamia, Judea, Capadocia, Ponto, de la provincia de Asia, de Frigia, Panfilia, Egipto y de las áreas de Libia alrededor de Cirene, visitantes de Roma (tanto judíos como convertidos al judaísmo), cretenses y árabes. ¡Y todos oímos a esta gente hablar en nuestro propio idioma acerca de las cosas maravillosas que Dios ha hecho!». Quedaron allí, maravillados y perplejos. «¿Qué querrá decir esto?», se preguntaban unos a otros. Pero otros entre la multitud se burlaban de ellos diciendo: «Solo están borrachos, eso es todo».
Los discípulos habían preguntado: “¿Cuándo restaurarás nuestro reino?” Aquí estaba la respuesta: en este momento y en este lugar. Tal como lo había prometido en Isaias.
Isaías 11:11-12 (NTV) En ese día, el Señor extenderá su mano por segunda vez para traer de regreso al remanente de su pueblo: los que queden en Asiria y el norte de Egipto; en el sur de Egipto, Etiopía y Elam; en Babilonia, Hamat y todas las tierras costeras distantes. Levantará bandera en medio de las naciones y reunirá a los desterrados de Israel. Juntará al pueblo disperso de Judá desde los confines de la tierra.
Allí, en ese cuarto en la planta alta, en el Dia de Pentecostés, se cumplió esta profecía. Había gente de todas las naciones y lenguas. Esto sucedió por un propósito. Y esta es la respuesta a la pregunta de hoy (¿Cuál es el propósito del bautismo con el Espíritu Santo?): ¡El propósito del bautismo con el Espíritu Santo no es hablar en lenguas desconocidas ni en otros idiomas sino compartir el evangelio! Cada creyente recibe este bautismo espiritual en el momento de la conversión, lo que debería resultar en valor para testificar. Las lenguas extrañas no se trataban de lenguas por el bien de los creyentes. ¡Era para los no creyentes! Era para compartir la Buena Nueva con las personas en sus propios idiomas. No estoy diciendo que el don espiritual de lenguas no sea para hoy (hablaremos de eso cuando cubramos 1 Corintios 14). Brevemente te diré, que en Hechos 2, el propósito era claro. Jesús ya se los había dicho de antemano:
Hechos 1:8 (NTV) pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra.
¡El propósito del bautismo con el Espíritu Santo no es hablar en idiomas desconocidos, sino compartir el evangelio! Para esto es que nos da poder; para ir y hablarle a otros de Cristo y de su mensaje de salvación. Cada creyente recibe este bautismo espiritual en el momento de la conversión, lo que debería resultar en tener valor para testificar.
Necesitamos el poder del ES para empoderarnos y llenarnos de valentía para salir de nuestra zona de confort y exponernos al rechazo, a lo desconocido y hasta ser golpeados o asesinados por el nombre de Cristo. Que esto no te detenga. Lo puedes hacer porque en el momento que aceptas a Jesus como tu Salvador recibes al Espíritu Santo que ahora vive dentro de ti. ¿Has nacido de nuevo? Si es así, tienes al Espíritu Santo morando en ti para que hables de nuestro Señor Jesús. El hecho de hablarle a otros de Jesús es la evidencia de que has recibido el bautismo del Espíritu Santo y no el hablar en lenguas. ¿Está la evidencia de ello en tu vida?
- Lee los puntos de discusión anteriores en grupo, incluidas las citas bíblicas. ¿Cuáles son tus pensamientos iniciales sobre estos puntos?
- Cuando escuchas “bautismo con el Espíritu Santo”, ¿es algo que estás acostumbrado a escuchar o te asusta un poco?
- Lee Hechos 1:5. ¿Cómo explicarías la diferencia entre el bautismo con agua y el bautismo con el Espíritu Santo? ¿Por qué tener ambos?
- ¿Alguna vez has visto a alguien hablar en lenguas? ¿Cuáles fueron tus pensamientos al respecto?
- Lee Juan 14:16-17. Observe que el pasaje se refiere al Espíritu Santo como “él”. ¿Qué dice eso acerca de la naturaleza del Espíritu Santo? ¿Por qué es esto significativo?
- “Los discípulos fueron influenciados por el Espíritu Santo mientras caminaban con Jesús, pero ahora el Espíritu Santo habitará en ellos”. Explica esta cita. Habla sobre lo que significa ser “influido” versus “habitar”.
- Después de escuchar el mensaje y leer este artículo, ¿cómo responderías ahora a la pregunta de hoy: ¿Cuál es el propósito del bautismo con el Espíritu Santo?