Nuestro gran Dios se preocupa tanto por ti que te invita a tomar medidas para conocerlo más íntimamente.
Ver también la Edición Infantil de esta lección.
A los cristianos seguido se les dice que se supone que debemos orar y leer nuestra Biblia, así que renovamos nuestro compromiso para mejorar esas disciplinas. ¿Pero por qué? ¿Por deber? ¿Para ganar la aprobación de Dios? Mientras consideraras tus metas espirituales, la mejor motivación para mejorarlas es porque Dios se preocupa por ti y quiere tener una relación íntima contigo.
Dios es todo lo que necesitamos
En el Salmo 27, David se enfrenta a retos que lo hicieron vulnerable y temeroso. Esas amenazas lo llevaron a reflexionar y reafirmar como Dios es. Lo que necesitaba era a alguien para lo salvara y lo protegiera de sus enemigos. Se dio cuenta de que Dios es ese Salvador y Protector.
Salmo 27:1 El Señor es mi luz y mi salvación, entonces ¿por qué habría de temer? El Señor es mi fortaleza y me protege del peligro, entonces ¿por qué habría de temblar?
No importa a lo que nos enfrentamos en la vida, Dios es la respuesta. Él quiere que vengamos a él. Cada uno de nosotros de verdad le importa a Dios. ¡Que Dios tan increíble que quiere estar involucrado en nuestras vidas!
Dios merece una respuesta de nuestra parte
Cuando ves una maravillosa puesta de sol o una tormenta majestuosa, respondes con asombro. De la misma manera, cuando las personas se dan cuenta de quién es Dios, lo quieren reconocer – y con razón. La primera respuesta de David fue confiar en Dios.
Salmo 27:14 Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.
Dios también merece nuestra adoración.
Salmo 27:6 …En su santuario ofreceré sacrificios con gritos de alegría, y con música cantaré y alabaré al Señor.
A la luz de las amenazas en su contra, David respondió con obediencia. Quería vivir la vida conforme a la manera de Dios.
Salmo 27:11 Enséñame cómo vivir, oh Señor. Guíame por el camino correcto, porque mis enemigos me esperan.
Una persona puede responder a Dios sin conocer a Dios profundamente. Pero Dios nos invita a más.
Dios nos invita a conocerlo íntimamente
Mientras David escribió este Salmo, él anhelaba tener intimidad con Dios. Para él, el lugar más seguro de refugio estaba en la presencia de Dios.
Salmo 27:4 Lo único que pido le pido al Señor —lo que más anhelo— es vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida, deleitándome en la perfección del Señor y meditando dentro de su templo.
El templo era la señal visible de la presencia de Dios. Pero desde que Jesús vino, Dios está presente con toda Su gente. Así que podemos acercarnos a Dios, no sólo en los momentos difíciles, pero en cualquier momento. De hecho, David desea la presencia de Dios más que cualquier otra prioridad en la vida. Lo que es realmente sorprendente es que Dios también anhela la intimidad con nosotros.
Salmo 27:8 Mi corazón te ha oído decir: “Ven y conversa conmigo”. Y mi corazón responde: “Aquí vengo, Señor”.
Dios quiere entrar en una conversación viva contigo. Es por esto que los cristianos participan en hábitos espirituales como los que David ejemplifica.
- La soledad (4). La soledad y el silencio nos ayudan a centrarnos en la presencia de Dios sin distracción.
- La meditación (4). La meditación es llenar la mente con deleite sobre quién es Dios ( “perfecciones del Señor”) y conscientemente reflexionar sobre lo que ha dicho.
- La adoración (6). La adoración es una gran manera de expresar tu corazón hacia Dios.
- La oración (7). La oración es uno de los lados de una conversación, ya que compartimos nuestros corazones con Dios.
- La lectura de la Biblia. La lectura de la palabra de Dios es la otra cara de la conversación, ya que nos Él nos habla. Salmo 19 y el Salmo 119 muestran que la Escritura se encontraba en el centro de la relación de David con Dios.
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Buscar la intimidad con un Dios invisible es un reto. Toma tiempo. No estamos acostumbrados a ella. Pero Dios dice: “ven y conversa conmigo.” Jesús abrió el camino para que esto suceda. Así que se intencional. Apégate a eso. Rodéate de personas que puedan ayudarte. Por encima de todo, ten la seguridad de que Dios te invita a crecer profundamente en tu relación con él.
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Preguntas para comentar:
- Preparación: Ver el video juntos o invita a alguien para resumir el tema.
- ¿Cuál es tu reacción inicial al video/artículo? ¿Está de acuerdo con alguna parte? ¿Qué saltó a la vista?
- Lee Salmo 27:1. ¿Qué nos dice esto acerca de cómo es Dios? ¿Cómo es esto exactamente lo que David necesitaba?
- ¿Cómo has descubierto que Dios es todo lo que necesitas? Da ejemplos.
- Explora rápidamente el Salmo 27. ¿Cómo se siente David y que hace en respuesta a quién es Dios?
- ¿Cómo definirías la “intimidad con Dios”? ¿Qué ejemplos humanos podrían ayudar a ilustrar esto?
- Lee Salmo 27:4. ¿Qué dirían tus amigos y familiares que es “lo que más buscas”?
- ¿Cómo es que pensar en la oración y la lectura de la Biblia como dos caras de una conversación ayudan a acercarse a Dios?
- Lee Salmo 27:8. ¿A tu corazón escuchado a Dios decir: “Ven y conversa conmigo?” Explica.
- ¿Cuál es el mayor obstáculo que enfrentas en desarrollar una relación íntima con Dios? Explica.
- Llévatelo: Escribe una medida de acción personal basada en esta conversación.