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Puntos de conversación:
- La línea de ascendencia de Jesús nos muestra la historia de la Biblia.
- Dios invita a los pecadores a ser parte de su historia.
- Las personas se unen a la familia de Dios porque Él se hizo hombre.
Aunque se esperaba al Mesías durante siglos, hay muchas cosas en torno a la historia de Jesús que fueron completamente inesperadas: una familia, un embarazo y un gozo.
En esta primera lección, hablaremos de “Una familia inesperada.” Para empezar, reiteramos que creemos que “toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar…” según 2 Tim 3:16. Por lo tanto, aunque parece que no hay mucho que aprender de la genealogía de Jesús, si hacemos una pausa para mirarla más de cerca. Entonces decimos que
Toda la Escritura está inspirada por Dios y es útil para enseñar, incluida la genealogía de Jesús. Este árbol genealógico tiene una historia que contar.
Y si eres como el cristiano común, me imagino que cuando llegas a los pasajes de Los evangelios donde narran la genealogía de Jesús, te la saltas. Sin embargo, te insto a que leas estos pasajes porque te cuentan algo inesperado. No solo se trata de una lista de nombres, sino de lo que está detrás de esos nombres.
Para comenzar, sentemos la base:
Mateo 1:1 El siguiente es un registro de los antepasados de Jesús el Mesías, descendiente de David y de Abraham.
Lucas 3:23-38 Jesús era conocido como el hijo de José. Oh carica… Adán era hijo de Dios.
Mira los nombres: desde el principio, tenemos a Adán, Eva (relato de Lucas). Del relato de Mateo tenemos a Abraham (y por consiguiente a Sara), a David (y a Betsabé) y a muchas otras familias a quienes se les dio la promesa de que de su unión Dios proveería hijos que llevarían a un Hijo específico que salvaría al mundo: Jesús. Tal vez, te preguntes qué hay de especial en este relato genealógico. La respuesta es que:
La línea de ascendencia de Jesús nos muestra la historia de la Biblia.
Empezando desde el primer libro de la Biblia, Génesis, con Adán.
Génesis 3:15 Y pondré hostilidad entre tú y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Su descendiente te golpeará la cabeza, y tú le golpearás el talón».
Aquí está hablando de Jesús. ¡Este niño (Jesús) fue largamente esperado! Se esperó no solo por 40 semanas (9 meses) ¡si no por más de 4,000 años! Desde el principio ya estaba escrito que nacería Jesús. Luego vemos a Jesús en la promesa hecha a Abraham.
Génesis 12:2-3 Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti».
Después que Sara no podía tener hijos, dio a luz a Isaac, quien engendró a Jacob, y así hasta llegar a David. Dios le prometió a David un rey eterno que vendría de su línea genealógica.
2 Samuel 7:12-13 (RVR60) cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. Él edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.
Y así sucesivamente, empezando desde Adan hasta llegar a José, esposo de María y padre aunque no biológico, nace Jesús. Detrás de Jesús, hay un árbol genealógico. Esto es importante, porque muestra que la genealogía de Jesús prueba que la Biblia es verdadera, y mayormente que ¡todo apunta a Jesús! Todo en la Biblia, desde el Génesis hasta el Apocalipsis señala y habla de Cristo Jesus.
Al leer la genealogía de Jesús, nos damos cuenta quienes fueron su familia. Sin embargo, lo inesperado de esta historia es que:
Dios invita a los pecadores a ser parte de su historia.
¡Piensas que la historia de tu familia es una locura! Pues piensalo dos veces. Estos hombres y mujeres del árbol genealógico de Jesús definitivamente fueron familiares inesperados para un Hijo tan Santo. Si no me crees, miremos a Noé. Si, el mismo Noé quien junto a su esposa e hijos (y sus esposas) fueron los únicos justos que se salvaron en el diluvio. Este gran hombre le falló a Dios. Él se emborrachó vergonzosamente e hizo que su hijo pecara contra él.
Génesis 9:20–21 Después del diluvio, Noé comenzó a cultivar la tierra y plantó un viñedo. Cierto día, bebió del vino que había hecho y se emborrachó, y estaba recostado y desnudo dentro de su carpa.
Más adelante este pasaje continúa diciendo que uno de sus hijos lo encontró desnudo y se burló de él. El hijo pecó por faltarle respeto a su padre, pero en cierto modo, Noé fue el causante de su pecado.
Otro ejemplo de una familia de pecadores, es Abraham, el padre de la fe. Tenía tanta fe en Dios que salió sin guía y sin rumbo a una tierra desconocida porque Dios se lo pidió. Sin embargo, llegó a Egipto donde tuvo miedo por su vida a causa de la belleza de su esposa. Para protegerse, le dijo a su esposa que mintiera diciendo que ella era su hermana (que sí lo era ya que era su media hermana, (si, en esos días era permitido, ya no), y no su esposa
Génesis 12:12–13 Cuando los egipcios te vean, dirán: “Ella es su esposa. ¡Matémoslo y entonces podremos tomarla!”. Así que, por favor, diles que eres mi hermana. Entonces me perdonarán la vida y me tratarán bien debido al interés que tienen en ti».
Muchos años después, vemos a su propio hijo, Isaac, cometiendo el mismo pecado. Isaac le mintió a Abimelec de la misma manera que su padre.
Génesis 26:7 Cuando los hombres que vivían allí le preguntaron a Isaac acerca de Rebeca, su esposa, él dijo: «Es mi hermana». Tenía temor de decir: «Ella es mi esposa» porque pensó: «Me matarán para conseguirla, pues es muy hermosa»;
Después tenemos a Jacob, hijo de Isaac. Jacob le robó la primogenitura y la bendición que conlleva ser el primogénito a su hermano Esaú. Jacob se hace pasar por Esaú poniéndose pieles de cabra ya que su hermano era velludo y como su padre Isaac ya estaba más ciego que un murciélago se le hizo fácil engañarlo.
Génesis 27:7 —Soy Esaú, tu hijo mayor—contestó Jacob—. Hice tal como me pediste; aquí está lo que cacé. Ahora levántate y come, para que puedas darme tu bendición.
De Jacob saltemonos a David quien la Biblia dice que fue conforme al corazón de Dios. Pero, él también, así como los otros personajes en la genealogía de Jesús, pecaron. David cometió adulterio y asesinato.
2 Samuel 11:14–15 Entonces, a la mañana siguiente, David escribió una carta a Joab y se la dio a Urías para que se la entregara. La carta le daba las siguientes instrucciones a Joab: «Pon a Urías en las líneas del frente, donde la batalla sea más violenta. Luego retrocedan, para que lo maten».
Lee la historia completa para que entiendas bien la historia. La cosa es que David se acostó con la mujer de Urias, la embaraza y para tapar su pecado trata de embobar al hombre para hacer pasar el embarazo como suyo. Como no lo logra, lo manda a matar en el campo de batalla. El punto es que Dios solo puede usar a los pecadores porque eso es todo lo que hay porque todos somos pecadores. No hay nadie perfecto. Más nos usa a los pecadores primeramente porque quiere hacerlo. Segundo, porque es amoroso y misericordioso. Nuestro pecado no nos descalifica para estar en Su historia. Sabemos que el pecado nos separa de Dios. Así que para estar en Su familia, ese pecado necesita ser tratado. Incluso los antepasados de Jesús necesitaron el perdón. También nosotros necesitamos ese perdón y lo encontramos en Jesús.
Las personas se unen a la familia de Dios porque Él se hizo hombre.
Desde aun antes de la creación, Jsus ya era Dios como dice Juan 1:1: “En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios.”. Sin embargo se hizo hombre, naciendo de una virgen para morir en una cruz y darnos salvación. Desde una perspectiva prospectiva, no solo las personas antiguas llegan a ser parte del árbol genealógico de Dios el Hijo. Aun aquellos que nacieron después e incluso ahora, los que confían en este Hijo llegan a ser adoptados como hijos e hijas del Dios Todopoderoso.
Juan 1:12-14 pero a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios. Ellos nacen de nuevo, no mediante un nacimiento físico como resultado de la pasión o de la iniciativa humana, sino por medio de un nacimiento que proviene de Dios. Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre.
¡Qué maravilloso! Jesus se encarnó, o sea se hizo carne. Siendo Dios, tomó un cuerpo humano, fue carne naciendo como cualquier bebé. No le importó dejar su trono en el cielo. Mas por amor a nosotros vino y murió en una cruz. Y es a través de su sacrificio que podemos ser salvos.Y así venimos a ser hijos suyos. Es a través de Jesus que venimos a ser adoptados a su familia. Ahora somos sus hijos. Somos parte de su árbol genealógico. Somos la familia inesperada de Jesús. Quien iba a pensar que nosotros, siendo tan pecadores, vinieramos a ser parte de la familia de Dios. Y todo por lo que hizo Jesús en la cruz del calvario.
Dios quiere traer a personas poco probables como tú, yo y otros que conoces a la bendita familia de Cristo. No por obras o por haber nacido en la familia correcta. Más bien, por la fe en el Hijo que se unió a la familia caída de la raza humana cuando se hizo hombre. Solo faltas tu, si no le has aceptado como tu Salvador de tus pecados. Ven y forma parte de su inesperada familia.
- ¿Cuál es tu reacción inicial al tema? ¿Qué te llamó a la atención?
- ¿Cuáles son algunas de tus tradiciones navideñas favoritas?
- Lee Mateo 1:1-17. Resalta las figuras clave que notas en el árbol genealógico de Jesús. ¿Cómo arroja esto luz sobre toda la historia de la Biblia?
- Lee Mateo 1:18-25. Resalta las personas y los hechos importantes sobre el nacimiento de Jesús. ¿Por qué crees que Dios escogió entrar al mundo de esta manera?
- Lee Gálatas 4:4-6. ¿Por qué es significativo este pasaje? ¿Qué significa para ti que puedes ser adoptado en la familia de Dios?
- Lee Juan 1:12-13. ¿Qué tenemos que hacer para ser aceptados en la familia de Dios?
- ¿Hay algún paso que debas tomar basado en el tema de hoy?